Reseña
Felicidad renovado, estilo nordico y minimalista, ambiente distendido y agradable de materiales nobles, madera, azulejos y mármol con su clásico verde agua generan un lugar ideal para relajarse y disfrutar. La propuesta de Felicidad es sana, liviana Y natural. Desayunos super completos con frutas, Granola, tostadas francesas, panes caseros o revueltos de claras con frutos secos y muchas mas opciones. Riquísima pastelería y jugos naturales. Muchos sandwich, con salmón ahumado, pollo o diferentes carnes, ensaladas super abundantes y variadas ademas de wraps y platos para elegir.
En primer lugar el precio no es desde $150..el menú del día es de $170. La comida es un bien, pero el servicio es pésimo, las meseras le ponen esmero pero la cocina es muuuuyyyyy lenta. Fui en tres oportunidades y siempre tardaron pidiera lo que pidiera y aunque el local no esté lleno.
Se come muy bien y no me parece caro. Almorzamos una ensalada y un bagel de salmón con una jarra de limonada y gastamos $460. La ensalada muy fresca y abundante, con verduras grilladas, semillas, etc. El bagel venia con ensalada y papas rústicas. A veces la atención es un poco lenta cuando el lugar está lleno, pero siempre con la mejor predisposición. Es muy linda la ambientación.
Siendo las 17 hs no tenían Bagel de salmón ya que solo lo sirven en almuerzo.
Pedimos Tostadas French con canela y miel. Suaves, la canela no estaba. Dos tostadas $70.
También Smoked Power (tostadas, huevo revuelto, palta y salmón) Muy bueno. $190.
Atención mala - Relación precio/cantidad mala - Ambiente y decoración buena.
Fui a pedir la limonada de menta y gengibre porque la recomendaron acá. Fue lo mejor que me pasó el sábado.
Pesima atención. Nos fuimos sin merendar por el maltrato que recibimos de parte de la camarera. Una pena porque conociamos el lugar pero luego de esta experiencia no vamos a regresar mas. No lo recomiendo para nada.
Fuimos a merendar el sábado a la tarde. Todo excelente como siempre. Recomiendo la limonada con menta y jengibre. La mejor de Capital.
UN VERDADERO DESASTRE. Para que me fuera desactivaron los tomacorrientes donde tenía enchufados notebook y celular. Consecuencia: información perdida y desperfectos en los dispositivos. Quisieron retirarme los platos dos veces y aún no había terminado de merendar. Nunca más vuelvo.
El lugar es lindo pero con precios para turistas. Me sirvieron una milanesa de 10cm de diámetro y me cobraron $160. Una ridiculez!
Muy buen lugar en Palermo. Precios acordes y riquísimas french toasts.
No vuelvo más.Un vaso de licuado $75Pedí tostadas q nunca me trajeronLa moza q me atendió cuando se las reclame se sorprendió y me dijo \"pensé q te las habían traído\". Era la única q atendía arribaNo vayan!!!!!